Colitis ulcerosa
Brotes. Signos y síntomas
Vídeo educativo: “Mide tu calidad de vida para poder mejorarla”, realizado y revisado por: Dr. Francesc Casellas. Hospital Universitario Vall d´Hebron. Barcelona.
¿Por qué aparece un brote?
Los brotes, la mayoría de las veces, aparecen sin ninguna relación con algo que haya hecho el paciente. Existen algunos factores que pueden ser capaces de provocar la reactivación de la enfermedad como dejar de tomar la medicación, (Adherencia terapéutica) tomar antiinflamatorios no esteroideos de forma no controlada, sufrir eventos vitales estresantes o padecer infecciones, tanto intestinales como de otro tipo. Por este motivo, es importante seguir unas recomendaciones generales que pueden disminuir la aparición de brotes.
Deben acudir a los controles médicos y seguir las pautas que se indican en la consulta. Es importante recordar que no se debe dejar el tratamiento aunque se encuentre bien y eviten la toma de antiinflamatorios no esteroideos sin consultarlo con su médico. En lugar de estos antiinflamatorios, pueden utilizar el paracetamol para resfriados comunes, estados gripales o dolores de cabeza. Es recomendable seguir una una dieta sana, equilibrada y variada, hacer ejercicio, intentar evitar situaciones de estrés y mantener una actitud positiva adaptándose a cada situación durante el curso de la enfermedad.
¿Todos los brotes son iguales?
No todos los brotes son iguales. El tipo de síntomas y su intensidad son muy variables.
Los médicos intentan clasificar la gravedad de las manifestaciones clínicas en forma de índices de actividad. Estos índices se obtienen a partir de la puntuación de una serie de variables como el número de deposiciones con sangre, la temperatura corporal, el número de pulsaciones y el valor de hematocrito (glóbulos rojos) y marcadores inflamatorios como la proteína C reactiva o la velocidad de sedimentación globular en una analítica de sangre. Los brotes pueden ser leves, moderados o graves. Hasta un 15% de los pacientes pueden presentar un brote grave que, a veces, también se manifiesta con complicaciones intestinales como la hemorragia digestiva baja, la rotura del colon o perforación y la dilatación grave del colon (megacolon). Es importante clasificar la gravedad del brote porque el tratamiento puede ser muy diferente.
¿Cuáles son los signos y síntomas más frecuentes de la Colitis ulcerosa?
La Colitis ulcerosa puede manifestarse de forma gradual o aparecer bruscamente y en ocasiones tan súbitamente, que requiera cirugía precoz. Suele caracterizarse por presentar periodos de actividad o brotes en los que se produce un aumento transitorio de la gravedad de los síntomas (exacerbación), seguidos de periodos de remisión espontáneos o inducidos por el tratamiento. En formas activas graves de CU, el colon puede sufrir una dilatación, lo que clínicamente se denomina como megacolon.
Los signos y síntomas que produce la CU son muy variables y dependientes de la extensión de la enfermedad y de la actividad inflamatoria de cada periodo concreto. Por lo general, los síntomas más frecuentes son los siguientes:
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- Diarrea: La diarrea se entiende como un aumento de agua en las heces, causando un aumento en el número de deposiciones y un cambio en su consistencia, con deposiciones más acuosas o sueltas. Es uno de los síntomas más frecuentes de la Colitis ulcerosa.
En los pacientes con Colitis ulcerosa, el número de deposiciones es mayor y su volumen escaso, debido a la que inflamación del recto dificulta la evacuación de las mismas. Cuando la afectación del recto es intensa (Proctitis), puede producirse la liberación de pequeñas cantidades de sangre fresca y moco (clínicamente denominado como “esputo rectal”) de manera aislada o conjuntamente con deposiciones líquidas y acompañarse de “síndrome rectal” caracterizado por sensación de urgencia, incontinencia y de deposición incompleta (tenesmo). Cuando la enfermedad es más extensa (Colitis izquierda y Pancolitis), las deposiciones suelen acompañarse de sangre oscura, moco y/o pus y diarreas nocturnas.
En cuanto a la gravedad de la enfermedad, un brote leve de Colitis extensa o Pancolitis puede causar un incremento moderado del número de deposiciones (menos de 4 al día), con escasa cantidad de sangre. En un brote moderado, el número de deposiciones (entre 4 y 5 al día) y la presencia de sangre en las mismas aumenta. En un brote grave de Pancolitis, las deposiciones se incrementan notablemente (más de 6 al día), su consistencia es más líquida, aparece diarrea nocturna y presencia de gran cantidad de sangre en todas las deposiciones. - Dolor abdominal: No suele ser uno de los síntomas característicos de la CU, aunque puede estar presente en algunos pacientes, dependiendo de la extensión y gravedad de la inflamación o del brote. Principalmente lo presentan aquellos pacientes con Colitis ulcerosa extensa moderada y grave. Se manifiesta en forma de cólicos y dolor abdominal intenso en la zona central, inferior o izquierda del abdomen. El dolor abdominal puede estar causado por las contracciones musculares del intestino asociadas a los movimientos intestinales, las cuales ejercen una tensión excesiva sobre la capa mucosa inflamada, causando sensación de dolor.
- Diarrea: La diarrea se entiende como un aumento de agua en las heces, causando un aumento en el número de deposiciones y un cambio en su consistencia, con deposiciones más acuosas o sueltas. Es uno de los síntomas más frecuentes de la Colitis ulcerosa.
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- Hemorragia rectal o Rectorragia: Junto con la diarrea es otro de los síntomas más frecuentes de la CU. En la capa mucosa del colon, existen gran cantidad de vasos sanguíneos, por lo que la presencia de úlceras originadas por el propio proceso inflamatorio de la mucosa intestinal, pueden causar la liberación de sangre de forma aislada o durante las deposiciones. La coloración de la sangre puede variar en función del tipo de CU del paciente; así, la sangre roja y fresca con presencia de moco acompañando a las deposiciones o de forma aislada, puede indicar afectación rectal (proctitis); mientras que la presencia de sangre oscura acompañada de moco o pus puede ser indicativo de Colitis izquierda o extensa (Pancolitis).
En los pacientes con Colitis ulcerosa extensa, puede haber una cantidad de sangre variable mezclada con las heces, en alguna o todas las deposiciones, o incluso aparecer de forma aislada. Si el brote es moderado, la presencia de hemorragia rectal en las deposiciones es más frecuente; y si el brote es grave, la cantidad de pérdida de sangre aumenta y tiene lugar durante todas las deposiciones, incluso puede producirse de forma aislada en forma de hemorragia rectal o intestinal. - Fiebre: La presencia de un proceso inflamatorio puede ser causa suficiente para la presentación de fiebre en cualquier circunstancia; por lo tanto, los pacientes que padezcan un brote moderado o grave de la enfermedad (donde el proceso inflamatorio está activo) pueden cursar estados febriles durante el mismo. La presencia de fiebre elevada debe tenerse en cuenta, ya que puede ser indicativo de un proceso infeccioso ocasionado por la enfermedad (abscesos, fístulas, etc.).
- Hemorragia rectal o Rectorragia: Junto con la diarrea es otro de los síntomas más frecuentes de la CU. En la capa mucosa del colon, existen gran cantidad de vasos sanguíneos, por lo que la presencia de úlceras originadas por el propio proceso inflamatorio de la mucosa intestinal, pueden causar la liberación de sangre de forma aislada o durante las deposiciones. La coloración de la sangre puede variar en función del tipo de CU del paciente; así, la sangre roja y fresca con presencia de moco acompañando a las deposiciones o de forma aislada, puede indicar afectación rectal (proctitis); mientras que la presencia de sangre oscura acompañada de moco o pus puede ser indicativo de Colitis izquierda o extensa (Pancolitis).
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- Anemia: La anemia suele manifestarse en forma de malestar general, cansancio, fatiga, irritabilidad y palidez en la piel. Dada la frecuencia e importancia de este síntoma en la EII se trata de manera más detallada en capitulo de Anemia y ferropenia.
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- Fatiga: Algunos pacientes con Colitis ulcerosa pueden presentar sensación de excesivo cansancio o fatiga, condicionando su calidad de vida. Esta fatiga o sensación de excesivo cansancio puede relacionarse con factores diversos, algunos relacionados con la propia enfermedad (anemia, brote de actividad, etc.), con déficits nutricionales, con la alteración del sueño o con factores psicológicos (miedo a la enfermedad, no aceptación de la misma, estrés, etc.).
- Pérdida de peso: A pesar de no ser un síntoma muy frecuente en los pacientes con CU, las alteraciones de la mucosa intestinal conducen a una reducción en la capacidad de absorción de nutrientes, lo que se traduce en una pérdida de peso en los pacientes. Esta pérdida de peso también puede ser causada por el proceso inflamatorio; ya que cuando éste tiene lugar se produce una mayor demanda y consumo de energía resultado de la degradación de nutrientes (catabolismo), lo que se traduce en un metabolismo acelerado y en una consecuente pérdida de peso.
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- Alteraciones psicológicas: La Colitis ulcerosa no está asociada con ninguna enfermedad mental conocida; aunque debido a su carácter crónico y a sus síntomas puede producir alteraciones en el estado emocional del paciente, afectando directamente a su autoestima y causándole estrés psicosocial en el paciente. Si esto ocurre, es recomendable que el paciente hable con Su médico de manera sincera y fluida o con algún profesional que le aporte la ayuda y apoyo necesario para afrontar y sobrellevar la enfermedad.
- Retraso en el crecimiento y maduración sexual en los niños
- Otras manifestaciones extraintestinales: La Colitis ulcerosa es una enfermedad sistémica, lo que implica que puede causar alteraciones o síntomas en otros órganos o sistemas del cuerpo, aunque en menor frecuencia que la enfermedad de Crohn. Estas manifestaciones extraintestinales (MEI) pueden ser el resultado de la propia naturaleza inflamatoria de la CU, asociándose temporalmente con un brote de actividad de la enfermedad o apareciendo de manera independiente al mismo, lo que implica un tratamiento diferente para su desaparición. Entre las MEI más comunes se encuentran las manifestaciones dermatológicas, oculares y articulares.
En pacientes con enfermedad inflamatoria intestinal, se describe un aumento del riesgo de complicaciones tromboembólicas (frecuentemente venosas), especialmente en situaciones de actividad o brote intestinal en tratamiento con corticoides; siendo necesario en pacientes hospitalizados por brote, la prevención de estos procesos con heparina subcutánea.
¿Todos estos síntomas van a limitar mi vida?
La actividad de la enfermedad y la aparición de síntomas influyen sobre la calidad de vida o la sensación de fatiga. Pero es muy diferente de un paciente a otro. Por ejemplo, dos per-sonas con la misma enfermedad, el mismo tratamiento y la misma gravedad de las lesiones en el intestino, pueden tener el mismo grado de actividad de la enfermedad, pero una puede percibir una buena calidad de vida y la otra, en cambio, estar muy limitada para su vida diaria, con falta de vitalidad . Ello se debe a que cada paciente reacciona de forma dis-tinta al proceso de reajuste a los cambios que provoca la enfermedad, en función de sus características individuales, como sexo, biografía personal, religión, soporte familiar, nivel socioeconómico, cultura, conductas mal adaptativas, etc.