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Publicado en categoria Enfermedad de Crohn

Daniel (GMAIL): ¿Qué tipo de ejercicios puedo realizar si tengo enfermedad de Crohn?

A 0 personas le han resultado útil esta pregunta.
  • E
    Equipo 5y 10m 1w 18h 18min 54s
    Buenas tardes
    Tengo Enfermedad de Crohn desde hace años. Lo que más sufro de esta enfermedad es el cansancio y los dolores articulares, las cuales me dificultan el realizar las tareas del día a día. Quisiera saber qué tipo de ejercicios deportivos me podrían ir mejor para que estos síntomas de una forma u otra no sean un lastre. Actualmente salgo a caminar y no tardo más de 1 hora. En ocasiones cuando tengo dolores articulares me obligo a salir a caminar, aunque al día después o me encuentro con más cansancio todavía o me encuentro un pelín mejor, así que es una incógnita para mi el qué hacer. 
    Gracias de antemano
    
    Un saludo

    Buenas tardes Tengo Enfermedad de Crohn desde hace años. Lo que más sufro de esta enfermedad es el cansancio y los dolores articulares, las cuales me dificultan el realizar las tareas del día a día. Quisiera saber qué tipo de ejercicios deportivos me podrían ir mejor para que estos síntomas de una forma u otra no sean un lastre. Actualmente salgo a caminar y no tardo más de 1 hora. En ocasiones cuando tengo dolores articulares me obligo a salir a caminar, aunque al día después o me encuentro con más cansancio todavía o me encuentro un pelín mejor, así que es una incógnita para mi el qué hacer. Gracias de antemano

    Un saludo

  • E
    Equipo 5y 10m 1w 18h 17min 44s
    Hola Daniel, 
    
    En relación a tu pregunta, comentarte que la actividad física en la EII incrementa la calidad de vida y aumenta la densidad ósea, sin mermar en la evolución clínica de la enfermedad. Incluso es recomendable mantener cierta actividad física en situaciones en que la enfermedad está activa para evitar la atrofia muscular; sobre todo en aquellos pacientes en tratamiento con corticoides, aunque evitando sobrecargar las articulaciones para evitar complicaciones. 
    
    El ejercicio en pacientes con síntomas articulares es fundamental ya que aumenta la fuerza y la flexibilidad, reduce el dolor articular y ayuda a combatir la fatiga. 
    
    La falta de ejercicio puede hacer que tus articulaciones estén más rígidas y te duelan más. 
    
    Como actividades especialmente beneficiosos en caso de afectación articular, se recomienda la natación y el pilates. Si estás muy limitado, un fisioterapeuta puede ayudarte, estableciendo un programa de ejercicio físico personalizado más adecuado a tu situación.
    
    Suele ser recomendable realizar los siguientes tipo de ejercicios:
    
    1. Ejercicios de amplitud de movimiento: Alivian la rigidez y aumentan la capacidad de movilizar las articulaciones. Incluyen movimientos como elevar los brazos por encima de la cabeza o rotar los hombros hacia delante y hacia atrás. 
    
    2. Ejercicios de fortalecimiento o entrenamiento con pesas: Recuerda que hay que evitar ejercitar los mismos grupos musculares dos días seguidos. Descansa un día entre entrenamientos, y tomate un día adicional (o dos) si te duelen las articulaciones o se inflaman. 
    
    3. Ejercicio aeróbico: Caminar, hacer bicicleta o usar una maquina elíptica. Es el más seguro y efectivo si se practica la mayoría de los días de la semana. 
    
    Los ejercicios de consciencia corporal como algunos tipos de yoga o taichí pueden ayudarte a mejorar la postura y el equilibrio y promover la relajación. Es conveniente comentarle al instructor sobre tu enfermedad para evitar posiciones que puedan provocar dolor. 
    
    No es necesario que te exijas demasiado, puedes sobrecargar los músculos y empeorar el dolor de las articulaciones. 
    
    Recuerda que antes de comenzar a realizar ejercicio, es recomendable  mover las articulaciones suavemente para entrar en calor; hacer ejercicio con movimientos lentos y fáciles cuando sea necesario o estés mas limitado y descansar si sientes dolor. 
    
    Tómalo con calma y aumenta lentamente la duración del ejercicio a medida que avanzas. 
    
    Esperamos haberte ayudado, 
    
    Equipo de Educainflamatoria

    Hola Daniel,

    En relación a tu pregunta, comentarte que la actividad física en la EII incrementa la calidad de vida y aumenta la densidad ósea, sin mermar en la evolución clínica de la enfermedad. Incluso es recomendable mantener cierta actividad física en situaciones en que la enfermedad está activa para evitar la atrofia muscular; sobre todo en aquellos pacientes en tratamiento con corticoides, aunque evitando sobrecargar las articulaciones para evitar complicaciones.

    El ejercicio en pacientes con síntomas articulares es fundamental ya que aumenta la fuerza y la flexibilidad, reduce el dolor articular y ayuda a combatir la fatiga.

    La falta de ejercicio puede hacer que tus articulaciones estén más rígidas y te duelan más.

    Como actividades especialmente beneficiosos en caso de afectación articular, se recomienda la natación y el pilates. Si estás muy limitado, un fisioterapeuta puede ayudarte, estableciendo un programa de ejercicio físico personalizado más adecuado a tu situación.

    Suele ser recomendable realizar los siguientes tipo de ejercicios:

    1. Ejercicios de amplitud de movimiento: Alivian la rigidez y aumentan la capacidad de movilizar las articulaciones. Incluyen movimientos como elevar los brazos por encima de la cabeza o rotar los hombros hacia delante y hacia atrás.

    2. Ejercicios de fortalecimiento o entrenamiento con pesas: Recuerda que hay que evitar ejercitar los mismos grupos musculares dos días seguidos. Descansa un día entre entrenamientos, y tomate un día adicional (o dos) si te duelen las articulaciones o se inflaman.

    3. Ejercicio aeróbico: Caminar, hacer bicicleta o usar una maquina elíptica. Es el más seguro y efectivo si se practica la mayoría de los días de la semana.

    Los ejercicios de consciencia corporal como algunos tipos de yoga o taichí pueden ayudarte a mejorar la postura y el equilibrio y promover la relajación. Es conveniente comentarle al instructor sobre tu enfermedad para evitar posiciones que puedan provocar dolor.

    No es necesario que te exijas demasiado, puedes sobrecargar los músculos y empeorar el dolor de las articulaciones.

    Recuerda que antes de comenzar a realizar ejercicio, es recomendable mover las articulaciones suavemente para entrar en calor; hacer ejercicio con movimientos lentos y fáciles cuando sea necesario o estés mas limitado y descansar si sientes dolor.

    Tómalo con calma y aumenta lentamente la duración del ejercicio a medida que avanzas.

    Esperamos haberte ayudado,

    Equipo de Educainflamatoria